Con esta ruta de un día, os propongo descubrir uno de los rincones con más encanto del Baix Camp, la Baronía de Escornalbou. Este antiguo señorío se sitúa en el interior de la comarca entre la Sierra de Pradell y l’Argentera y la llanura del Baix Camp. Su paisaje se caracteriza por suaves colinas de bosque mediterráneo y sobre todo por la presencia del embalse de Riudecanyes, alrededor del cual haremos la ruta. Vamos a hacer una breve introducción histórica sobre el origen de este territorio:
En el año 1162 el rey Alfonso I de Cataluña conquistó la Montaña de Escornalbou, la cual se encontraba bajo dominio musulmán. Dice la leyenda que San Miguel ayudó a las tropas y al rey a tomar el lugar el 8 de mayo de aquel año, entonces día de la Aparición de San Miguel y que en su honor, el mismo rey decidió construir un monasterio augustiniano dedicado a San Miguel. Asimimo, dió el lugar a Dios, a San Miguel y a Joan de San Boi, camarero de la Catedral de Tarragona, momento desde el cual el Castro Cornu Bovis pasa a depender del arzobispado. La donación se hizo con la condición de restaurar, mejorar y repoblar aquel territorio, hecho que propició sucesivas donaciones de varios términos y pueblos, que formarán parte de la Baronía de Escornalbou como Colldejou, Vilanova d’Escornalbou, Riudecanyes, Duesaigües, Pradell de la Teixeta, la Torre de Fontaubella, L’Arbocet y L’Argentera.
Con esta ruta de un día os propongo visitar algunos de estos pueblos en una ruta en coche. Empezamos a las 10 de la mañana en el Castillo Monasterio de San Miquel de Escornalbou:
CASTILLO MONASTERIO SAN MIQUEL D’ ESCORNALBOU
Originalmente construido como monasterio, San Miquel d’ Escornalbou fue testigo de muchos hechos históricos y cambios que han ido modelando su actual fisionomía. El edificio que hoy vemos es fruto de la intervención de un personaje del cual hablaré en varias ocasiones: el diplomático reusense Eduard Toda (1855-1941). Toda compró el antiguo monasterio en 1911. El conjunto entonces estaba prácticamente en ruinas después de muchos años de abandono y destrucción a raíz de la desamortización de Mendizábal y de la Primera Guerra Carlista. Amante del patrimonio, la arqueología, la historia y las culturas, Eduard Toda decidió hacer del antiguo monasterio su castillo, su residencia de jubilación. Cabe decir que la restauración fue ciertamente idealista, puesto que se añadieron elementos nuevos como torres inspiradas en la arquitectura noreuropea. La visita en el interior del Castell nos permite ver los aposentos de la casa, cuya decoración nos recuerda a los chateaux franceses y a los palacetes de la campinya inglesa. Salas como el Salón Azul, la Biblioteca o el Comedor son de especial interés. ¿Sabíais que Toda invitó numerosas personalidades del mundo de la cultura, de la iglesia y de la política? Algunos ejemplos son su gran amigo el Cardenal y Arzobispo de Tarragona Vidal i Barraquer, el cual disponía de cámara propia, e incluso el rey Alfonso XIII, que visitó al diplomático en una ocasión.
Actualmente, el Castillo está siendo restaurado y no es posible visitar la totalidad de su interior. Se prevee que las obras terminen en otoño del 2022. De la misma forma, los exteriores del Castillo también estan siendo restaurados y se estan recuperando senderos que conectan los pueblos de la Baronía con este monumento. Lo que sí podéis hacer si os acercáis al Castillo, es recorrer algunos de los 4 paseos de su entorno: el Paseo de los Frailes, el Camino de Santa Bárbara, el Camino de los Huertos o el Camino de la Font del Sarraí. Todos ellos, son recorridos cortos, fáciles y muy frondosos. Además los 3 primeros ofrecen espectaculares vistas a la Costa Dorada y a la Sierra de Pradell y l’Argentera.
Itinerarios Castillo Monasterio de Sant Miquel d’Escornalbou
L’ARGENTERA
Después de visitar el Castell Monasterio d’Escornalbou, bajaremos al pueblo de l’Argentera, situado a 5 km. Esta es seguramente la población con más encanto de la Baronía, puesto que se trata de un pequeño pueblo de unos 117 habitantes y luce pintorescas calles y casas de piedra roja, típica de la la zona. Pasear por l’Argentera es sin duda una delicia: sus calles, las portaladas de las casas y sus ventanas se visten de plantas y flores, especialmente de hortensias.
L’Argentera se vio favorecida por las estancias de Eduard Toda durante las obras de restauración del Castillo, quien adquirió una casa situada en la Plaza de la Iglesia. Este mismo personaje modernizó el pueblo gracias a varias mejoras, como por ejemplo haciendo llevar agua de la Font de la Bartra. De hecho, los argenterenses le dedicaron una calle y un busto, este situado al final de la Calle Mayor. Una recomendación que personalmente querría añadir a la visita de l’Argentera es la romántica Font Vella, situada junto al pueblo y a la que llegaréis saliendo por la calle de Eduard Toda y cogiendo el Camino de la Font Vella. La fuente, documentada ya en el 1907 por una reforma que se hizo, está emplazada en medio de un bosque de plátanos, aterrazado en diferentes niveles y donde encontramos alguna mesa y bancos de piedra. Es por lo tanto un buen lugar para hacer un picnic al aire libre, acompañados por sonido del arroyo. El espacio es cautivador especialmente en otoño, cuando las hojas de los plataneros forman una alfombra de diferentes tonos marronosos y todo el entorno se vuelve un rincón inspirador. También muy cerca de la Font Vella, siguiendo un caminito de piedra paralelo al arroyo, estan los antiguos lavadores que tampoco podéis dejar de ver, ni de fotografiar. Si sois instagramers os encantará.
DUESAIGÜES
Encaramos la tarde cogiendo la carretera de Duesaigües para dirigirnos hacia el impresionante viaducto dels Masos, uno de los dos viaductos del término de Duesaigües. Estos viaductos se construyeron a finales del siglo XIX con la llegada del ferrocarril de la línea Barcelona-Zaragoza, que fue impulsada por la Compañia de los Ferrocarriles de Tarragona a Barcelona y Francia . ¡Por cierto! otra gran proeza de ingeniería fue la construcción del túnel del ferrocarril de l’Argentera, que fue hasta 1957 el más largo de España con algo más de 4 km. El ingeniero de la Compañía, Eduard Maristany fue reconocido con el título de Marqués de l’Argentera, por su labor y contribución al desarrollo del país.
Podéis recorrer la pasarela inferior del viaducto, las vistas no os dejarán indiferente.
Seguimos por la carretera de Duesaigües a Riudecanyes y pronto nos encontramos las aguas del pantano a nuestra derecha. La carretera, a pesar de que tiene dos carriles es estrecha y con bastantes curvas, ¡así no os despistéis contemplando el embalse! A pesar de que realmente es una ruta para disfrutar del panorama.
CASA VELLA DEL PANTANO
Junto a la carretera, esta vez a la izquierda, encontraréis la entrada a otro edificio con mucha historia y que actualmente es una moderna casa rural: La Casa Vella del Pantà. Esta Casa se construyó a principios del siglo XX durante las obras del embalse y como residencia para el ingeniero. No obstante, nunca tuvo esta función y a pesar de ser propiedad de la Comunidad de Regantes, años después quedó abandonada y fue objeto de actos vandálicos. Pero fue gracias a Ina y Albert, una pareja que vive en L’Argentera, que la Casa volvió a la vida. Las obras empezaron en el 2012 y después de pocos años ya empezaron a llegar los primeros huéspedes. De la Casa merece la pena destacar no solo su diseño moderno, con un toque rural sino también los diversos materiales ecológicos que se emplearon como por ejemplo el revestimiento de los baños, denominado tedelakt compuesto de cal y resistente a la humedad y a los hongos. Igualmente de interesante es el horno de la planta baja, un horno masivo que es capaz de quemar 14 kilos de leña durante 1 hora y media y calentar prácticamente durante todo el día. La construcción de este horno la llevó a cabo el mismo arquitecto de la casa, Flemming Abrahansom (www.forneytenergi.dk) un referente en la arquitectura sostenible. Junto a sus alumnos, organizaron un taller en la Casa Vella para aprender a construir el horno, de este modo Ina y Albert solo tuvieron que pagar los materiales.
Actualmente, con la situación pandémica, la Casa ha sufrido muchas cancelaciones, pero na ha empezado una nueva aventura empresarial elaborando jabones artesanales con su socia Mònica (www.instagram/illicium.nature) usando productos de la Baronía, como el Aceite de Oliva Virgen Extra Escornalbou, flores y hierbas del campo e incluso ¡algarroba! Si queréis aprovechar para pasar todo el fin de semana en la zona, este es un buen lugar para alojarse.
RIUDECANYES
Para acabar la jornada, visitamos la población de Riudecanyes, donde podéis hacer cualquiera de las rutas de Oleoturismo que encontraréis en la misma web de La teva ruta, como por ejemplo la experiencia “Vivir la tierra” que os permite visitar un campo de olivos, el núcleo de la villa y el Centro de Interpretación Los Frutos del Paisaje, que permite hacer una aproximación al paisaje, a la agricultura y a los productos del campo de esta comarca. Además, también os ofrecemos una degustación de pan con aceite OVE Escornalbou, 100% arbequina y de gran calidad. También en el mismo espacio encontraréis la Agrobotiga, donde podéis comprar este y otros productos de la tierra.
Si venís en octubre o principios de noviembre, podréis participar en la experiencia de cosechar las olivas usando el arpa y el capazo. Y si lleváis niños, tenemos una versión de la ruta especial pensada para ellos “Del olivo a la aceitera”.
Recordad también, que os ofrezco hacer esta misma ruta guiada, ¡una buena opción para dejaros llevar y nos perderos ningún detalle!
Alojamientos recomendados
Casa Vella del pantà (Riudecanyes)
Casa La Guineu (L’argentera)
Restaurantes recomendados
L’Era (Riudecanyes)
El Cunirri (Duesaigües)
Menjars de l’Argentera (L’Argentera)